Una pausa al mediodía
Todos tenemos un lugar que nos da buenas vibraciones …el mío se llama Keik Café.
El restaurante, regentado por tres hermanos colombianos, está situado en los alrededores de la oficina y siempre que lo he visitado, no solamente tomo una excelente comida sino que, además, comparto gratos momentos con mis acompañantes.
Lo descubrí hace ya algunos años pero ultimamente lo visito con más frecuencia. Su especialidad son las deliciosas ensaladas con ingredientes frescos y una muy buena presentación. En el menú de mediodía, suelen ofrecer las exquisitas empanadas argentinas (que son mi perdición) y una gran variedad de postres y pasteles elaborados por ellos mismos.
Un plus: la extensa carta de tés e infusiones para los adictos como yo.
Os recomiendo Keik Café para una agradable pausa diurna o para una cena ligera y sin prisas.